El pasado 24 de septiembre la Junta de Andalucía aprobaba un Real Decreto con el que pretende resolver el problema de las viviendas irregulares, que en Andalucía afecta a 327.583 construcciones. Durante el Pleno ordinario celebrado ayer, el Partido Popular (PP) puso encima de la mesa una moción de apoyo a la nueva norma, gesto en el que Izquierda Unida (IU) detectó electoralismo a las puertas de la campaña electoral, máxime cuando como indicó el portavoz del PSOE Antonio Sánchez, «los Reales Decretos no se apoyan, se ejecutan, puesto que son de obligado cumplimiento». La mala noticia saltó cuando el equipo de Gobierno admitió que ignora cuántas viviendas se encuentran en esta situación en Rincón.
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