El Ayuntamiento aprueba el presupuesto municipal por la puerta de atrás

El Pleno municipal ha aprobado esta mañana por la mínima el presupuesto para el ejercicio 2020. Lo ha hecho si contar con el dictamen de la Comisión de Hacienda y dando menos de 24 horas a la oposición para estudiar el expediente que rechazaba la mayor parte de las 60 alegaciones presentadas.
Dos puntos en el orden del día después de que, con motivo de una moción presentada por Podemos, el concejal de Transparencia, Borja Ortiz (PP), admitiera que «la transparencia en este Ayuntamiento continúa siendo una asignatura pendiente» y de que reconociera que el Consistorio está incumpliendo la ley, el tripartito PP-Cs-PMP traía a Pleno la aprobación definitiva de los presupuestos municipales, introduciéndolos como asunto urgente y, por tanto, sin que ni siquiera haya pasado por la debida Comisión de Hacienda.
Confirmándose las denuncias realizadas por Izquierda Unida (IU) el pasado mes de diciembre, su edil José Luis Gómez ha lamentado haber recibido la documentación ayer al mediodía, mientras otros grupos políticos han asegurado que ni siquiera se les había enviado. Desde las filas socialistas, su portavoz, Antonio Sánchez, ha reprochado lo apresurado del proceso, a pesar de que hace 15 días que finalizó el plazo de alegaciones, indicando que no se ha contemplado la posibilidad de incluirlo en el orden del Pleno ordinario, ni siquiera convocar un Pleno extraordinario -como de hecho se hizo en diciembre para su aprobación inicial- para poder debatir el asunto con la atención que merece.
El concejal de Economía y Hacienda, Antonio Fernández (PP), se ha escudado en la necesidad de aprobarlo cuanto antes para que las distintas concejalías puedan trabajar con un nuevo presupuesto, en lugar de recurrir al prorrogado de 2019 después de que el tripartito fuera incapaz de elaborar las cuentas a tiempo para cumplir con la Ley de Haciendas Locales y empezar el año con un nuevo presupuesto.
Vox, sin reprobación
Por otro lado, tal y como avanzó el PSOE hace unos días, el concejal de Vox, José Antonio Rodríguez, se enfrentaba a la solicitud de reprobación en el pleno, después de que acusara al partido socialista de «haber robado, secuestrado, violado y asesinado», así como de sugerir que también participaba en «prostitución de menores».
El socialista Javier Jerez se ha mostrado especialmente duro con Rodríguez, reclamando incluso la dimisión del concejal de extrema-derecha. Jerez ha anunciado que los hechos hace días que se pusieron en conocimiento de la Fiscalía, al considerar que podría haberse cometido un delito de calumnia y de incitación al odio. Tanto Podemos, como IU y Ciudadanos se han sumado a la condena de las polémicas declaraciones de Rodríguez que, lejos de retractarse, se ha jactado de las mismas preguntando «¿Creían que me iba a acobardar?».
Por su parte, el PP, por boca de Ortiz, ha tachado las declaraciones de «falacia» y «fuera de tono», si bien han votado en contra de la reprobación por considerar que «busca romper los puentes entre PP y Vox». De este modo, se ha reproducido la misma votación que en su día paralizó la comisión de investigación que con anterioridad se había aprobado en Pleno para esclarecer las presuntas irregularidades en los procesos de selección de la Policia Local: Si entonces fue el voto de Vox el imprescindible para que Francisco Salado paralizara aquella investigación, hoy han sido los de Salado, junto al PMP, los que han salvado al edil de Vox de la reprobación.