No es pueblo para jóvenes

Históricamente, la juventud ha estado abandonada en Rincón de la Victoria. Ni las políticas que viene desarrollando el Ayuntamiento ni el empresariado apuestan por este segmento de la población a la que incluso el Consistorio ha hurtado espacios como los parques, cerrándolos con vallas afiladas como cuchillos. Ahora, con la llegada del COVID-19, la situación es aún peor si cabe.
Si vives en Rincón y tienes entre 12 y 16 años no esperes una gran oferta cultural, deportiva y de ocio para ti. No hay nada, porque incluso algunas de las instalaciones deportivas con que cuenta el municipio están ahora inexplicablemente clausuradas, a diferencia de lo que sucede, por ejemplo, en la vecina Málaga.
Las únicas actividades que ha sido capaz de parir este Ayuntamiento para esta juventud son una serie de conciertos retransmitidos por YouTube. Algún lumbreras habrá pensado que nada mejor que enchufar de nuevo a nuestr@s jóvenes a las pantallas después de un trimestre entero de clases virtuales… y las que están por llegar.
Curiosamente, no sucede lo mismo con los actos concebidos para un público adulto. Conciertos de arpas, de flamenco, musicales de los 80, festivales de comedia… todo presencial, que l@s votantes son l@s votantes. Sí, otro lumbreras dirá que por qué un concierto de arpas no le va a gustar a un adolescente o un tablao flamenco… y tiene razón, pero seamos, francos, no es lo que prefieren… (basta ver el público que asiste). Ni siquiera la oferta de motocine es apta para menores, porque dependen de sus padres y madres para que les lleven en coche.
¿Tan difícil es pensar en el conjunto de la población, aunque no voten? Pues parece ser que sí, lo que nos lleva a una segunda reflexión: ¿A qué dedican su tiempo libre quienes no tienen nada que hacer? El abanico de posibilidades es amplio y, ya les avanzo, que no siempre bueno.