Por qué Tejero no es mejor que Otegi

Arrinconados Tejero

Hace un par de semanas se levantó polémica por la presencia del ex Guardia Civil Antonio Tejero,  en los actos oficiales de la Benemérita por el 12 de octubre. El protagonista del golpe de Estado del 23-F asistió, al parecer, invitado por su hijo, el cura de La Cala del Moral, que oficiaba el acto religioso. Izquierda Unida (IU) denunció estos hechos y cómo concejales del Partido Popular, del Grupo Andalucista, de Ciudadanos y del PSOE compartieron espacio con Tejero. Se equivocó IU, como se equivocaron en su día esos mismos partidos junto a Tejero al promover o no negarse a declarar a Otegi persona non grata en el municipio.

No pensaba escribir sobre el tema, pero la publicación estos días de una fotografía del concejal no adscrito, Óscar Campos, posando sonriente con Tejero, me ha llevado a ello. Es cierto que esta fotografía como la de los concejales del PP junto a Tejero choca. ¿Cómo es posible que quienes más se golpean el pecho como patriotas estén tan a gustito con quien puso en jaque a la democracia y al rey que tanta pleitesía rinden? Es una contradicción en sí misma, como lo es que el propio Tejero quiera participar en los actos oficiales de un cuerpo al que ya no pertenece porque, sencillamente, se le expulsó y degradó.

Sin embargo, Tejero cumplió 15 años y nueve meses en la cárcel y ha saldado su deuda con la sociedad. Sin entrar en los oscuros detalles del 23-F que premeditadamente no se esclarecen, lo cierto es que Tejero fue un golpista entonces y ha pagado por ello. En la actualidad, no ha encabezado ningún otro alzamiento ni ha protagonizado revuelta alguna; sencillamente y pese a su pasado, es un jubilado que pasa sus últimos días en su tierra natal.

A pesar de que lo que para los demócratas representa su figura, no se le puede negar su participación en ciertos actos; cosa bien distinta es si hubiera recibido invitación oficial, pero no parece ser el caso, sino que fue invitado por su hijo. En ese sentido y a mi parecer, punto negativo para IU por reprochar algo que pude no gustar, pero que no sólo no es legal sino que va en contra de quienes defendemos que cumplida la condena, debería poderse rehacer las vidas.

Dicho esto, punto negativo para PP, PA, Cs, Campos y PSOE, porque ellos y sólo ellos propiciaron que Otegi sea persona non grata en Rincón de la Victoria. Otegi se parece a Tejero en que también ha cumplido su condena: pasó seis años y medio de cárcel -y sigue inhabilitado para cargo público- por intentar reconstruir la ilegalizada Batasuna bajo órdenes de ETA. Sí, se le condenó por integración en organización terrorista, pero no ha sido declarado culpable de delitos de sangre, ni siquiera de tener condición de dirigente en ETA.

¿Qué diferencia hay pues entre Otegi y Tejero? ¿Por qué para PP, PA, Cs, Campos y PSOE Tejero puede estar en los actos de la Guardia Civil y Otegi ni siquiera puede pisar el pueblo? Esa es una contradicción que ellos tendrán que enmendar, como IU tendrá que averiguar por qué opina lo contrario en ambos casos.

Para concluir, les diré en lo que sí se diferencian Tejero y Otegi: mientras el primero no tiene nada que aportar a la sociedad española -salvo que tire de la manta y cuenta la verdad de lo que sucedió en el 23-F-, Otegi sí podría jugar un papel esencial en la normalización de la vida vasca. El revanchismo selectivo de los sectores más conservadores o, incluso, de los más ignorantes lo impide.