Salado y Gómez Muñoz se desdicen y admiten incumplimientos del contrato de alumbrado

El Pleno ordinario de diciembre, que tendrá lugar mañana jueves, escenificará el reconocimiento por parte de Francisco Salado (PP) y José Mª Gómez Muñoz (PMP) de una realidad que vienen negando desde hace más de dos años: Endesa-Enel, la UTE adjudicataria de la privatización del servicio de alumbrado municipal desde la legislatura 2011-2015 (mayoría absoluta del PP) hasta 2025, viene incumpliendo sistemáticamente el contrato.

La opacidad y las contradicciones a la hora de facilitar información ha sido la tónica general en los diferentes equipos de Gobierno liderados por Francisco Salado. En 2015 y a la luz de lo expuesto por el PP durante sesión plenaria, ya se evidenció que la privatización del servicio se realizó de manera chapucera. Entonces, el PP reconoció que el inventario de puntos de luz se había realizado de manera negligente, contabilizando un 22% menos, lo que suponía unas 1.400 farolas.

Ahora, y tomando datos de una auditoría de 2013 -dos años antes de que se hablara de ese déficit de 1.400 farolas-, Gómez Muñoz asegura que “se contabilizó un total de 6.450 puntos de luz, que finalmente pasaron a ser 8.450 tras realizar un nuevo recuento”. No es el único desfase, según el líder del PMP, «de los 147 cuadros de luz del municipio, se han descubierto 33 nuevos cuadros que no estaban contratados por el Ayuntamiento y que no incluían contador, pero continuaban ofreciendo suministro eléctrico».

Esta nueva realidad choca frontalmente con las afirmaciones tanto de Salado como de Gómez Muñoz, que desde 2017 vienen afirmando en sesión plenaria que todas las deficiencias se estaban corrigiendo. Según el orden del día del Pleno de mañana, no sólo ambos dirigentes tendrán que desdecirse sino que, al fin, Salado podrá cumplir con el compromiso que desde hace más de dos años viene incumpliendo: el compartir con la oposición en el Pleno los informes de incumplimientos.

En agosto de 2017, Arrinconados solicitó vía Registro municipal dichos informes, sin que desde entonces ni siquiera haya contestado el equipo de Gobierno, hurtando el derecho a la ciudadanía de conocer la calidad de su gestión.

La admisión de estos incumplimientos llega tarde y de un modo opaco; algo, por otro lado, que ha acompañado siempre a esta privatiación del servicio de la que jamás se publicó un informe que demostrara el ahorro del 55% que prometió el PP cuando ejecutó unilateralmente la privatización.

A esta opacidad se suma, además, la falta de diligencia municipal, tal y como se evidenció en el Pleno del pasado mes de julio, cuando la corporación reconoció la pérdida de miles de euros en concepto de indemnización por incumplimientos de Endesa-Enel, sencillamente, por haber dejado caducar los expedientes municipales.

La falta de control en los servicios privatizados supone graves pérdidas en las arcas municipales, mientras las adjudicatarias se enriquecen; incluso en el caso de EMMSA, participada al 50% con FCC, se descubrió en 2016 que el Ayuntamiento había estado pagando una factura de la luz durante 15 años que, en realidad, era responsabilidad de la empresa. A pesar de ello, en el mismo Pleno de mañana, la intención de PP-Cs-PMP, con el apoyo de Vox, es aprobar la privatización de la empresa de limpieza.